Microsoft introduce un sistema de actualización diferencial en Windows 11 con el Update 24H2, reduciendo los tiempos de espera y optimizando el rendimiento general.
Microsoft ha lanzado el Update 24H2 para Windows 11, una actualización que promete acelerar el proceso de actualización del sistema operativo, haciendo que los usuarios esperen menos tiempo para completar las instalaciones y reinicios. Este avance viene tras un esfuerzo sostenido de la compañía para optimizar el proceso de actualización en Windows 11, especialmente desde la implementación de paquetes de instalación más compactos introducidos en la versión 22H2.
¿Cómo Funcionan las Nuevas Actualizaciones Diferenciales en Windows 11?
Con el Update 24H2, Microsoft incorpora un sistema de actualización diferencial, que utiliza tanto diferencias hacia adelante (forward differential) como hacia atrás (backward differential). Este sistema permite que solo se actualicen las partes específicas de un archivo que han cambiado, en lugar de reemplazar archivos completos, lo cual hace que los paquetes de actualización sean más ligeros y rápidos.
Según Microsoft, el sistema funciona calculando la diferencia entre una versión base de un archivo y su versión modificada. Ambas diferencias, la hacia adelante y hacia atrás, se empaquetan en un único archivo de actualización que luego se distribuye a todos los dispositivos con Windows 11. Esto permite que las actualizaciones sean aplicables en versiones muy antiguas del sistema sin necesidad de actualizaciones previas.
Ventajas en el Rendimiento de las Actualizaciones de Windows 11
Este enfoque diferencial también trae consigo mejoras significativas en el rendimiento. Microsoft ha declarado que, en pruebas internas realizadas en máquinas virtuales en Azure, se han observado resultados alentadores:
- Tiempo de instalación: las actualizaciones se completaron un 45,6% más rápido.
- Reinicio: los tiempos de reinicio disminuyeron en un 39,7%.
- Uso de CPU: se redujo el uso del procesador en un 15,3% durante el proceso de actualización.
Los beneficios también son notables en dispositivos más antiguos o en aquellos que actualizan desde versiones anteriores, como la 22H2. Por ejemplo, la actualización a la nueva versión 24H2 se completó un 43,6% más rápido, con un 33,5% menos de tiempo de reinicio y una reducción del 25% en el uso de CPU.
Mejoras en la Distribución de Paquetes y Uso de Memoria
Además de la tecnología diferencial, Microsoft ha implementado otras optimizaciones para hacer el proceso aún más eficiente. Ahora, Windows 11 usa una mayor cantidad de memoria RAM como caché para el manifiesto de parches, permitiendo un acceso más rápido a la información almacenada durante la actualización. Esto facilita que las actualizaciones se distribuyan eficientemente en redes, especialmente en entornos con múltiples dispositivos, como empresas o centros educativos.
Esta mejora en el caché del manifiesto contribuye a que los paquetes de actualización no solo se distribuyan más rápido, sino que también impacten menos en el rendimiento general del sistema, minimizando la carga en recursos clave como la CPU.